Mira a su alrededor. Su casa, la casa de sus sueños. Y ella está allí, con él, y no está soñando. Step la abraza.
-¿Eres feliz?
Ella hizo un gesto afirmativo. Luego abrió sus ojos, llenos de minúsculas lágrimas transparentes. Él la miró.
-¿Qué te pasa?
+Tengo miedo
-¿De qué?
+De no volver a ser nunca tan feliz.
+Esto es precioso.
-¿Es tu casa no?
+¡Estás loco!
-¡Lo sé!
+Soy feliz. Jamás me había sentido tan bien, ¿y tú?
-¿Yo? - La abraza con fuerza.
- Estoy de maravilla
+¿Hasta el punto de llegar a tocar el cielo con un dedo?
-No, así no.
+¿Ah, no?
-No. Mucho más. Al menos tres metros sobre el cielo.